14 de mayo de 2013
Globo de noche
Se
me escapa todo en un segundo. Se resbala entre mis manos y vuelve a irse lejos,
donde yo no sé llegar. Voltea la mirada, sigue caminando. Y yo me desarmo y
lloro como ya casi no lo hacía. Se va, se va… y ya no hay brazo que alcance su
mano. Como un globo sube, yo le digo que vuelva, pero sigue subiendo, yo quiero
alcanzarlo, pero se va. Se lleva consigo todas las nubes y un poco de humo.
Esperá, todo ese humo no te sirve de nada; dale, quedate conmigo. Yo quiero que
se limpie, regalarle una flor amarilla, un pedacito de arcoiris, pero no me
escucha. Está muy concentrado en su destino de globo de noche y se va, se va
cada vez más lejos. Volvé. Hay paisajes que de día se ven mucho mejor. Hay
abrazos que de a dos, envuelven mucho más. Dale, volvé y volá conmigo. Sin
tanto humo y con más colores. Estoy segura que hay algunos que todavía no
conocés. Y si querés, puedo invetarme uno nuevo para vos. Volvé aquí, a la luz.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario