Yo no sabía
del calor de su piel,
ni de su
abrazo en invierno,
ni de todo
lo que se incendia.
Jamás imaginé
ese hombro desnudo,
ese brillo
al sol, ese cielo,
ese mar.
Yo no sabía
del temblor en las manos,
ni de la luz
en plena noche,
ni de la paz
en el centro y adentro.
No conocía
esa luna, ni esa fuerza,
ese puño,
ese ombligo,
ese pulso.
Yo no sabía
del tobogán en sus manos,
ni del
impulso ciego y enamorado,
ni de la
noche pidiendo revancha.
Jamás pensé
en el hueco, ni en el eco,
esa boca, esa
nube,
esa costa.
Yo no sabía
del color de su pecho,
ni del
viento que la eleva,
ni del roce
que la quiebra.
Yo no sabía
de ese amor,
ese beso,
ese vuelo,
esa ternura.
Yo nada
sabía.
Por dios!!! esto merece hacerse canción, es muy bello, muy bonito...
ResponderEliminarGracias bull! Ojalá tenga algún texto encancionado algún día :)
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